Colombia es, hoy por hoy, la potencia latinoamericana en la exportación de flores y el segundo productor mundial de este delicado producto. Presente en más de 100 mercados internacionales, la flor colombiana es una de las cartas de presentación más representativas del también denominado país cafetero, con una industria que movilizó, sólo en la temporada San Valentín 2019 más de 35.000 toneladas, por una suma que supera los US$1400 millones de dólares.

Desde una solitaria rosa, hasta un elaborado bouquet; a nivel mundial, las flores siguen siendo uno de los productos más comercializados y el regalo más emblemático del -mundialmente celebrado- Día de San Valentín, siendo la región latinoamericana protagonista en esta temporada, considerando que Colombia y Ecuador ostentan la segunda y tercera posición –respectivamente- en la producción de flores a nivel global, llegando a más de 100 mercados internacionales.

A partir de las cifras preliminares publicadas en febrero por Latam Cargo, respecto a la performance exportadora de Ecuador y Colombia para la temporada San Valentín 2019, queda de manifiesto el exponencial crecimiento que la industria floricultora tiene en ambas economías. Así, según los reportes de la entidad de carga aérea, durante las cuatro semanas previas a San Valentín 2019, se transportó desde Quito (Ecuador), Bogotá y Medellín (Colombia) hacia Norteamérica, Europa, Asia, Sudamérica y Oceanía más de 9.000 toneladas de flores por vía aérea.

Sólo para esta temporada, Latam Cargo, debió incrementar las frecuencias aéreas de carga desde Ecuador, de 10 vuelos cargueros a 31 frecuencias en la semana de mayor demanda. En Colombia ocurrió algo similar, con 12 vuelos por semana (6 desde Bogotá y 6 desde Medellín) y hasta un máximo de 23 vuelos en su semana de mayor tráfico. “En suma, la operación llegó a ser 2,4 veces mayor que una semana regular, transportando en total 4.920 toneladas de flores desde Ecuador y 4.180 de Colombia”, manifestó la compañía.

No obstante, cabe destacar que las cifras expuestas por Latam cargo sólo son sólo una pequeña muestra del real despliegue exportador de ambas naciones en materia floricultora durante la “temporada del amor”; de muestra un botón: Según la Asociación Colombiana de Exportadores de Flores (Asocolflores) “para la temporada de San Valentín 2019 se exportaron desde Colombia, segundo productor de flores a nivel global después de Holanda, más de 35.000 toneladas de flores, con cerca de 600 millones de tallos, para cubrir la demanda de 100 mercados internacionales”, entre los que se cuenta –por cierto- el mercado chileno.

DE LA FLOR COLOMBIANA…

Actualmente, la exportación de flores representa para el mercado colombiano un 3,5 % de las exportaciones totales del país, generando más de 1.400 millones de dólares al año lo que representa un aporte del 17% del impuesto de renta del agro colombiano. A nivel social, en tanto, la industria floricultora es también un sector de alto impacto para la nación sudamericana, considerando que sólo en 2018 generó más de 140.000 empleos rurales formales directos, al tiempo que involucra programas de sostenibilidad medioambiental de gran relevancia para el país. De hecho, el 40% de las exportaciones cuentan con la certificación internacional Florverde Sustainable Flowers.

A partir de las cifras expuestas, cabe preguntarse ¿Cómo Colombia ha logrado alcanzar el pináculo en la industria floricultora continental y global? Toda vez que hoy se alza como el segundo exportador mundial de flores, el primer exportador de claveles y el primer proveedor del principal mercado de consumo global de flores: Estados Unidos.

Por cierto, la calidad del suelo y el clima tropical colombiano han hecho del país un territorio más que idóneo para la producción floricultora, y es que –a diferencia de otros países productores- Colombia cuenta con un clima que permite el cultivo de productos de calidad y gran variedad de especies durante los 12 meses del año, logrando así satisfacer la demanda de los diferentes mercados internacionales en diversas temporadas. Ahora bien, entre la gama de productos exportados por el país sudamericano destacan: Rosas, claveles, astromelias, crisantemos, pompones, hortensias, anturios, heliconias y follajes, entre otros.

Al mismo tiempo, los 40 años de experiencia exportadora en esta industria y los avances en materia logística también explican su actual posición. En esta línea, cabe señalar que una de las claves del éxito colombiano en el complejo mercado de exportación floricultora es el hecho de que esta industria nació con un enfoque al mercado internacional, de ahí que el 95% de la producción de flores del país viaja a mercados internacionales. ¿Cuál es la vía más eficiente? Según cifras de Asocolflores, en general el sector exporta un 94% en carga aérea y un 6% por vía marítima. “El 75% de la carga aérea nacional exportada corresponde a la industria floricultora, obteniendo entre 300 y 400 millones de dólares anuales en fletes aéreos. En cuanto a la exportación marítima de flores, Colombia se consolida como líder a nivel mundial, con un crecimiento de 29%, llegando a destinos lejanos como Japón, Reino Unido y Australia” manifestó la entidad.

En materia logística, según lo publicado por Asocolflores, “el sector floricultor colombiano es uno de los líderes en el desarrollo de una logística eficiente que permite que sus exportaciones en vía aérea tarden menos que el promedio nacional. Los estudios muestran que las flores tardan en promedio entre 11 y 16 horas, desde que salen del cultivo hasta que se cargan los aviones. Esto es casi la mitad del tiempo promedio que utilizan otros productos para el mismo proceso que también se despachan por vía aérea, y que puede ser de cerca de 36 horas”. Por cierto, esta industria es un ejemplo de competitividad logística para otros sectores exportadores del país sudamericano.

En ese sentido, tras la performance exportadora colombiana para la temporada San Valentín 2019, Augusto Solano, Presidente de Asocolflores manifestó a la prensa especializada que “desde el sector (floricultor) siguen trabajando para mejorar cada vez más los aspectos logísticos para ser cada vez más eficientes. Si bien el sector mantiene su liderazgo como exportador, aún enfrentamos una serie de retos logísticos, en temas de innovación y de mercados que debemos trabajar conjuntamente a través de alianzas público-privadas que nos permitan mantener la competitividad y compartir estas buenas prácticas con otros sectores exportadores”.

DE LA EXPORTACIÓN E IMPORTACIÓN

Según cifras publicadas por ProColombia, en 2018 las exportaciones totales del sector floricultor colombiano alcanzaron los US$1.463 millones, correspondientes a 259.523 toneladas movilizadas; lo que representó un incremento de US$57,9 millones y 11.394 toneladas respecto a igual periodo de 2017. Así, el valor exportado en 2018 aumentó con respecto a 2017 un 4,2% y las toneladas exportadas crecieron un 4,6%.

Ahora bien, respecto a los principales mercados de destino, según la entidad, el sector floricultor colombiano llega a más de 90 países en el mundo. “Estados Unidos es el principal mercado de las flores de Colombia, siendo el destino del 78% del valor y del 76% de las toneladas totales exportadas (US$ 1.140 millones y 197 mil toneladas respectivamente). El principal puerto de entrada al mercado Norteamericano es el aeropuerto de Miami”, publicó la entidad. Según las cifras expuestas por ProColombia, los otros mercados relevantes en la exportación floricultora colombiana son: “Reino Unido y Japón, que representan un 4% de las exportaciones cada uno; Canadá y Holanda con el 3% y Rusia con el 2%”.

En lo relacionado a las especies exportadas, cabe destacar que Colombia cuenta con más de 1.600 variedades de flores. En esta línea, ProColombia informó que a diciembre de 2018 “Colombia exportó US$116 millones de pompones (US$1,8 millones más que en 2017), siendo esta la tercera variedad más exportada, sin incluir buques. Adicionalmente, otras variedades de crisantemos se exportaron por más de US$36,5 millones en 2018. Esta categoría incluye variedades como pompones, desbotonados y pompón spider; siendo los principales mercados de exportación de estas variedades: Estados Unidos (77%), Chile (8%), Reino Unido (7%), Canadá (4%) y Australia (1%).

Siempre en torno a la variedad de productos, la entidad colombiana sostuvo que “los obtentores o breeders desarrollan nuevas variedades a través de la investigación biogenética para responder a las demandas y tendencias del mercado”, variedades que cuentan con protección de propiedad intelectual, por la que los floricultores colombianos pagan regalías. “El sector también ha buscado la generación de valor agregado en sus productos, de manera que hoy en día es el principal exportador de buques, seguido por rosas y claveles logrando así llegar directo al consumidor final, y con un mayor margen de ingresos”, informó ProColombia.

En esta línea, es importante señalar que para completar su producción, Colombia importa esquejes, plántulas y flores complementarias para tener buenos acabados en los buques o ramos de flores que se exportan. Para estos fines, los principales proveedores del país son Holanda y Ecuador.

DE LAS TEMPORADAS…

San Valentín, el día de la madre, el día de Acción de Gracias y Navidad son para el mercado colombiano las cuatro temporadas para las que concentran su producción floricultora. En orden de mayor producción, como hemos establecido, el 14 de febrero (San Valentín) sigue siendo en la mejor temporada de exportación para los floricultores colombianos, cuyo despacho principalmente a Estados Unidos se triplican entre el 28 de enero y 10 de febrero. “En la temporada de San Valentín 2019, se exportaron más de 35 mil toneladas de flores en total.

Según los concesionarios de los aeropuertos de Bogotá y Rionegro, Opain e Airplan respectivamente, se realizaron más de 10 mil entradas de vehículos con carga de flor para ser exportada y despegaron desde Colombia más de 500 vuelos”, publicó ProColombia. Siempre en este plano, según cifras oficiales, San Valentín y el Día de las Madres representan para Colombia cerca del 30% del volumen de exportación anual, activándose en estas fechas el denominado Plan Pétalo. “Para San Valentín 2019, dicho Plan se activó desde el 15 de enero hasta el 10 de febrero de 2019, aunque su coordinación inició desde octubre de 2018, con el objetivo de atender de manera eficiente las más importantes temporadas del sector”, informó la ProColombia.

En tanto, los floricultores colombianos ya están preparándose para la próxima temporada de exportación ad portas: El Día de las Madres, cuya operación comienza de lleno a partir de abril, siendo la especie más exportada en esta ocasión: El crisantemo, proveniente de la región antioqueña.